En cualquier vivienda o establecimiento, la cocina es uno de los espacios más complejos en lo que refiere a la instalación eléctrica. Hay que tener en cuenta que a la cocina llegan los cinco circuitos del grado de electrificación básica y que, además, se trata de un espacio con zonas especialmente sensibles y susceptibles de poder sufrir una incidencia o siniestro relacionados con la parte eléctrica. En especial las zonas húmedas, como el fregadero, o los electrodomésticos que alcanzan altas temperaturas, como las placas vitrocerámica.
Normativa de los circuitos eléctricos de cocina
La normativa de instalación eléctrica de una cocina establece algunas condiciones de obligado cumplimiento. Veamos las más importantes.
- El fregadero, la placa de cocina y los enchufes en la cocina, según la normativa deben encontrarse a unas distancias mínimas.
- Las tomas eléctricas tienen que estar situadas en el exterior de un volumen formado por los planos verticales, que a su vez deben ubicarse a 0,5 metros del fregadero y de la placa de cocción.
- Las tomas eléctricas deben de estar separadas, como mínimo, 50 cm del fregadero o de la placa de cocinar.
- Como norma general, los enchufes tienen que ser instalados a 1,10-1,20 metros, como si se tratase de interruptores, con el objeto de evitar los riesgos derivados de la presencia de agua en el suelo, algo muy habitual en las cocinas.
Aspectos normativos a tener en cuenta al realizar una reforma eléctrica en cocina
Al realizar una reforma, hay que tener en cuenta que la norma ITC-BT-25 establece una serie de circuitos independientes que deben existir, obligatoriamente, en cualquier cocina, los cuales deben tener las siguientes características:
- Cada uno de ellos tiene que estar protegido por un interruptor automático de corte omnipolar (IGA). Dicho interruptor debe disponer de accionamiento manual y dispositivos de protección contra sobrecargas y cortocircuitos mejor conocidos como magnetotérmicos.
IGA: Interruptor General Automático
- C1: Iluminación 10A
- C2: Tomas de uso general 16A
- C3: Cocina y horno 25A
- C4: Lavadora, lavavajillas y termo 20A
- C5: Tomas de baño y cocina 25ª
- Para una mayor protección de los equipos (horno, microondas, nevera, lavavajillas, etc) e instalaciones eléctricas contra sobretensiones se ha de añadir, según la norma ITC-BT- 23, un limitador residencial básico o la solución COMBI SPU que integra el Limitador residencial completo contra sobretensiones transitorias y permanentes + Interruptor general automático (IGA).
- La normativa establece la posibilidad de separar el circuito C4, destinado al termo eléctrico, lavadora y lavavajillas, estableciéndose varios circuitos adicionales.
- Las tomas de conexión se ocultan bajo la encimera y, en este caso, sí pueden situarse a 30 cm de altura con respecto al suelo.
Cómo iluminar correctamente una cocina y ajustarse a normativa
La instalación eléctrica de la cocina tiene que garantizar un uso práctico, cómodo y seguro del espacio, que además optimice el consumo eléctrico y se ajuste a la normativa.
Para conseguir todo esto, es muy conveniente trabajar en base a un proyecto de iluminación. Este debe tener en cuenta tanto las cuestiones normativas como las estéticas y de confort, puesto que la cocina es un lugar donde muchas personas pasan muchas horas, no solo para cocinar, sino para disfrutar del ocio y hasta para teletrabajar. Por este motivo, la iluminación debe contribuir a crear una atmósfera acogedora, una manera sencilla de crear diferentes ambientes es utilizar un regulador de iluminación.
Es importante analizar el espacio disponible y elegir un tipo de iluminación que proporcione la suficiente luz a la cocina de un modo general, para poder desenvolverse con seguridad, y además enfocar, con más o menos intensidad, los diferentes puntos o rincones.
En este sentido, los focos de luz integrados en el falso techo son una opción muy práctica y segura, aunque no la única. Otras opciones son, por ejemplo, los típicos fluorescentes e, incluso, apliques laterales en las paredes.
En cuanto a las necesidades de intensidad de luz, una cifra media que suele cubrir muy bien las necesidades básicas de iluminación general de la estancia son 200 lux (lúmenes por metro cuadrado). Otras características recomendadas para la iluminación de la cocina son:
- Es importante que sea homogénea y uniforme.
- La luz debería llegar a todos los rincones por seguridad y para satisfacer todas las necesidades.
- Idealmente, la luz de la cocina debería adaptarse a la luz natural del espacio, actuando de forma combinada o complementaria.
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Gracias a nuestro asesoramiento, tu instalación eléctrica de la cocina estará sujeta siempre a normativa, que como hemos visto es más estricta que la de otros espacios de la casa, con el fin de asegurar la seguridad en un lugar especialmente sensible por la coincidencia de zonas húmedas con aparatos que alcanzan altas temperaturas.
