Tiempo de lectura: 2 minutos
¿Tiendes a olvidarte de las cosas y necesitas poner post-it en cada rincón? ¿Eres un amante de las listas? ¿Te gusta dejar mensajes por toda la casa? ¿Tienes pequeños artistas en casa que se pasan el día dibujando? Pues esta es la manualidad que necesitas en tu vida. Crea con nosotros una pizarra que podrás poner allá donde necesites de la forma más fácil y rápida posible. Atención: manualidad para toda la familia.
Lo mejor del cole, en casa
La pizarra, ya sea en un tablero o en una pared, es un elemento decorativo perfecto para cualquier hogar y, además, ¡puede ser de lo más útil! Ya sea en una habitación infantil, en la cocina o allá donde quieras… las normas las pones tú. Coloca o construye tu propia pizarra en función del uso que le vayas a dar y descubre todo su potencial.
En esta manualidad, vamos a enseñar el paso a paso de cómo hacer una pizarra en formato tablero utilizando el marco de una foto y pintura con efecto pizarra. Es muy fácil de aplicar y, en Brico Depôt, podrás encontrarla con acabado verde oscuro o negro. ¡Para gustos, las pizarras! No obstante, si te animas a hacer algo más grande, esta misma pintura puede servirte para convertir toda una pared de casa en una gran pizarra. El resultado es sofisticado, moderno y atemporal. ¿Empezamos?
¿Qué es la pintura con efecto pizarra?
La pintura con efecto pizarra es una pintura especial al agua, mucho más resistente que la normal negra, sobre la que se puede pintar con tiza. Además, este tipo de pintura facilita que se pueda borrar y limpiar con un trapo húmedo para volver a pintar sobre ella como en una pizarra de toda la vida. Su uso es para interiores y su aplicación es muy fácil.
¡Hora de desempolvar la bata del colegio!
Para esta manualidad, no olvides ponerte una bata y unos guantes cuando pintes y recuerda hacerlo en una habitación bien ventilada. Si se va a hacer con niños, es importante la supervisión constante de un adulto.
Construye tu propio tablero de pizarra
Material necesario
- Pintura con efecto pizarra
- Esmalte acrílico de tu color favorito (opcional)
- Brocha o rodillo
- Marco de fotos
- Guantes
- Trapo
- Tiza
Paso 1: Instala la mesa de trabajo
Paso 2: Prepara el marco
Separa la parte trasera del marco, que suele ser una lámina de madera fina sujeta con clavos o grapas. Aparta el cristal con cuidado y mantenlo alejado de la zona de trabajo para evitar que se rompa. Esta parte no la necesitaremos para la manualidad así que, si no le vas a dar ningún otro uso, recuerda reciclarlo correctamente y con cuidado.
Paso 3: Pinta la lámina de madera
Coge la lámina de madera que has separado del marco y píntala con la pintura de efecto pizarra y un rodillo pequeño o brocha. Pinta un par de capas y déjalas secar el tiempo indicado para asegurar un acabado suave y uniforme. Esto también asegurará que la tiza pinte mejor. Normalmente, este tipo de pintura suele tardar unas 24 horas en secar por completo. ¡La paciencia es la clave de cualquier buen proyecto!
Paso 4: Pinta el marco
Mientras tanto, puedes ir pintando el marco del color que más te guste. Nuestra recomendación es que lo hagas de un color vistoso y alegre que contraste con la oscuridad de la pizarra. Dependiendo del color original del marco, puede que tengas que aplicarle una capa de imprimación antes para que el color se adhiera correctamente. Si es así, espera el tiempo indicado por el fabricante y aplica después el esmalte acrílico del color elegido con la ayuda de un pincel o rodillo pequeño.
Paso 5: ¡Une las piezas del tablero y pizarra DIY lista!
Espera a que las dos partes estén totalmente secas, así evitarás que se dañe la pintura o que se quede pegado el marco con el tablero. Vuelve a montar las dos piezas y coloca las grapas que las unían. ¡Ya puedes empezar a pintar sobre tu pizarra!
