Tiempo de lectura: 2 minutos
En España y otros muchos países, es necesario tramitar una licencia de obra, otorgada por el ayuntamiento o administración local, para poder ejecutar cualquier tipo de reforma en una vivienda, edificio o local. Lógicamente, esta obligación también atañe a la reforma de una cocina.
A continuación, vamos a repasar si necesitas alguna licencia de obra para reformar la cocina y de qué tipo deben ser. ¡Empezamos!
¿Qué tipo de licencia de obra necesito para reformar la cocina?
Existen diferentes tipos de licencia o permisos necesarios para la reforma de la cocina de una vivienda o local. La necesidad de tramitar un tipo u otro dependerá, fundamentalmente, de la magnitud de la obra. Lógicamente, no se necesitan los mismos permisos para una obra menor, por ejemplo un simple cambio de los muebles de la cocina o de los azulejos, que para una reforma integral que implique cambios estructurales o de distribución.
Por otro lado, cuestiones como si se van a realizar modificaciones en las instalaciones, si es necesario o no retirar escombros o si la obra afectará a las propiedades del resto de vecinos, también determinarán el tipo de documentación a tramitar.
Finalmente, el ayuntamiento al que pertenece el local o vivienda donde se va a realizar la reforma es también un dato importante, ya que pueden existir diferencias en las ordenanzas y normativas locales que influyen en el tipo de documentación necesaria.
Por lo tanto, antes de acometer la reforma de una cocina es necesario conocer y analizar muy bien las acciones y cambios que implica dicha obra, en especial si se van a realizar transformaciones en las estructuras, movimientos en los puntos de agua, gas o luz, o si se va a llevar a cabo una redistribución de los espacios.
Permisos de obra necesarios según el tipo de reforma
En función de la clase de reforma a realizar tendremos que solicitar un tipo u otro de permiso o licencias de obra.
Reformas de acabados
- Este tipo de reformas afectan únicamente a los acabados de la cocina u otra estancia del inmueble: alicatado, cambio de suelo, colocación de azulejos, pintura, etc.
- Es necesario una licencia de obra menor, que normalmente se solicita al ayuntamiento indicando los trabajos a realizar y se pagan unas tasas según los metros cuadrados tratados.
- Algunos ayuntamientos permiten la solicitud de un simple comunicado de obra, el cual está exento de tasa.
Reformas en la distribución
- Se trata de obras de mayor envergadura, ya que implican la reducción o ampliación de dependencias, en este caso de la cocina. Este tipo de reformas deben ajustarse a la normativa recogida en el Código Técnico de la Edificación (CTE), donde se regulan las dimensiones mínimas de dependencias y otros muchos conceptos.
- Se requiere licencia o permiso de obra mayor y la solicitud de una nueva cédula de habitabilidad, o solicitud de primera o segunda ocupación.
Reformas estructurales
- Obras importantes que implican cambios en la parte estructural de la vivienda: vigas, forjados, cubiertas o paredes maestras.
- Requiere la obtención de la siguiente documentación: licencia o permiso de obra mayor, informe técnico emitido por un profesional cualificado y permiso de la comunidad de propietarios.
Reformas en las instalaciones
- Instalación o cambios en el sistema eléctrico, de gas natural, agua potable o extracción de humos.
- Si la reforma de la cocina implica cambios en las instalaciones es necesario la obtención de certificados específicos de cada instalación expedidos por un técnico cualificado y autorizado. Por ejemplo, el certificado de instalación eléctrica o boletín eléctrico.
Reformas en zonas comunes
- En ocasiones las obras de la zona cocina pueden afectar a zonas comunes colindantes como: terrazas, balcones o patios. Por ejemplo, cambios de puertas o ventanas que dan al exterior o extractores de humo que pasan por zonas comunes, como el patio de luces.
- Además de la licencia de obra mayor o menor, según el caso, también será necesario un certificado de aprobación por escrito de la comunidad.
Los permisos y licencias de obra para la reforma de las cocinas u otras partes de una vivienda o local, además de un trámite obligatorio son muy recomendables. Su solicitud y obtención que garantiza que las obras se están realizando según la normativa vigente y nos evitan multas, sanciones o posibles problemas o malentendidos con la comunidad de propietarios.
Ahora ya conoces todos los aspectos y tipos de licencia de obras a tener en cuenta a la hora de reformar tu cocina. ¡Esperamos que te sirva de ayuda!