¿Cómo preparar una pared para pintar?

Pintar las paredes de casa es una de las tareas de bricolaje que más a menudo nos animamos a realizar nosotros mismos. No obstante, aunque es aparentemente sencilla, es fundamental hacerlo preparando bien las superficies para conseguir un resultado profesional. En este nuevo post te contamos cómo preparar una pared para pintar paso a paso para que lleves tu trabajo de pintura al siguiente nivel.

Como siempre, en Brico Depôt puedes encontrar los mejores consejos para decorar tu casa, ya sea haciendo reformas, pequeñas obras de bricolaje como esta o instalando nuevo mobiliario para lograr estancias totalmente renovadas que te harán disfrutar de ellas al máximo. Además, tenemos disponibles múltiples tipos de pintura para paredes y techos para que elijas tu tonalidad favorita.

Cómo preparar una pared para pintar: Paso a paso

Puede haber dos razones principales por las que quieras saber cómo preparar una pared para pintar:

• Están en buen estado, pero te has cansado de su color actual y buscas un cambio de imagen
• Están deterioradas y quieres restaurarlas para que vuelvan a lucir como si fuesen nuevas, además de aprovechar para hacer el cambio de color

Sea cual sea tu caso, vamos a darte todas las instrucciones que debes seguir:

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Quita la pintura anterior o papel pintado de la pared

Lo primero que debes considerar al plantearte cómo preparar una pared para pintar y enfrentarte a una superficie es si será necesario eliminar el revestimiento o pintura anterior o si se puede pintar sobre ellos.

En el caso del papel pintado, siempre es más recomendable extraerlo para conseguir el mejor acabado. Ahora bien, según el tipo de papel pintado que tengas instalado, la extracción requerirá más o menos pasos, pero vamos a detallarte todos ellos de manera ordenada:

1. Haz unos cortes sobre el papel pintado en forma de cruz con la ayuda de un cúter y asegúrate de no arañar la pared de atrás. Trabaja con delicadeza siempre que recurras a objetos punzantes o cortantes.
2. Humedece el papel pintado con una esponja y agua caliente para facilitar la extracción. Moja la pared por partes y déjala reposar durante unos 5 minutos hasta que el papel se ablande. Y no olvides poner especial atención al trabajar en zonas cerca de interruptores y enchufes.
3. Desliza una espátula o cuchillo sobre los cortes anteriormente realizados y ve extrayendo la mayor cantidad de papel pintado posible parte por parte. Si tienes dificultades para hacerlo, incluso después de reblandecerlo con agua, prueba a impregnarlo con un producto decapante o quitapintura y continúa con el proceso de la misma forma.
4. Es posible que te hayan quedado algunos pequeños trozos de papel pintado que no puedas quitar con la espátula. Extráelos con la ayuda de un papel de lija de grano fino, con delicadeza, para no dañar la superficie.

Si la superficie está en buen estado, tan solo tendrás que preparar la pared para pintar, limpiarla correctamente y aplicar una o 2 manos de pintura. En cambio, si la superficie está en mal estado, con grietas, desconchada, es al temple o a la cal, antes de pintar es necesario repararla e imprimarla previamente con una imprimación.

Estudia las superficies detenidamente

A la hora de preparar una pared para pintar, es imprescindible que inspecciones con detenimiento el estado de las superficies para descubrir si tienen grietas, agujeros o desperfectos a corregir.

Préstale especial atención a las esquinas y a las zonas de alrededor de los cercos de las puertas y las ventanas, ya que es donde más suelen concentrarse este tipo de imperfectos. Localízalos y toma nota de su tipología para repararlos en los pasos que veremos en el próximo apartado.

Protege los elementos que puedan mancharse

Es una tarea minuciosa, pero absolutamente imprescindible para preparar una pared para pintar y conseguir un buen resultado. Recubre suelo, muebles, cercos de ventanas y puertas, enchufes o interruptores con cinta de pintor y plástico o papel protector desechable para evitar que se manchen de pintura cuando empieces la tarea.

¿Qué reparaciones hay que hacer para preparar una pared para pintar?

Como acabamos de ver, puede haber tres principales razones por las que estas superficies pueden presentar imperfecciones. Y cada una de ellas tiene una solución diferente, por lo que es necesario que prestes atención a cada una de ellas para resolver tu problema:

Reparación de grietas de paredes

Las grietas de las paredes se pueden formar por diversos motivos, como los cambios en la estructura de la casa, la humedad, o por soportar cargas pesadas. Preparar una pared para pintar en estos casos no te resultará complicado.

Con la ayuda de una espátula, agranda ligeramente las grietas que quieras reparar y elimina el polvo que quede dentro de ellas con la ayuda de un pincel seco. Una vez hecho, pulveriza un poco de agua sobre ella. Esta humidificación ayudará a que la masilla de relleno se aplique mejor.

A continuación, aplica la pasta directamente sobre la grieta con la ayuda de la espátula o una llana flexible, si dispones de ella, de arriba a abajo y de forma perpendicular a la grieta. Aplica poca cantidad cada vez y retira el producto sobrante con la espátula haciendo un movimiento vertical.

Después, deja secar la masilla sobre la grieta el tiempo indicado por el fabricante y, una vez transcurrido ese tiempo, pásale un taco o papel de lija para suavizar y nivelar la superficie. Por último, elimina el polvo sobrante tras el lijado con un trapo y ya habrás logrado preparar una pared para pintar.

Reparación de agujeros en una pared

Si tienes agujeros de tacos que ya no cumplen ninguna función tienes dos alternativas para preparar una pared para pintar: dejar el taco dentro y que este sirva de relleno o sacar el taco y rellenar el orificio con un trozo de gasa o papel.

En cualquier caso, remata la faena aplicando masilla de renovación de la misma forma que con la reparación de grietas para obtener un resultado mucho más perfecto.

Reparación de esquinas descorchadas

Para este caso, lo que debes hacer es reconstruir las partes golpeadas de las esquinas con la ayuda de una regla o un trozo de madera que te sirvan como tope y aplicar la masilla de relleno con el mismo proceso que en los casos anteriores.

En las superficies previamente pintadas no es raro encontrar pintura resquebrajada o mal adherida que deberás extraer con cuidado, con la ayuda de una espátula. Eso sí, hazlo despacio para arrastrar la menor cantidad de pintura posible. Y una vez extraída, lija la superficie con un taco de lija flexible de grano fino para igualarlo todo.

Pero espera, aquí no acaba esto. Cuando vayas a preparar una pared para pintar puede que te encuentres un problema realmente habitual y que es necesario tratar con la mayor brevedad posible.

Cómo quitar humedades o moho de la pared

El moho es frecuente en zonas de la pared o el techo que están en contacto con la humedad ambiental, pero la escasa ventilación también puede ser una razón de peso para que estas manchas aparezcan.

Si están recientes y aún no se han expandido, suelen desaparecer fácilmente al aplicar productos específicos anti-humedades con un paño. Tras hacerlo, es importante que dejes secar la zona por completo antes de empezar a aplicar la imprimación.

Ahora bien, si este es un problema persistente en tu hogar, antes de preparar una pared para pintar recomendamos su tratamiento con la ayuda de especialistas para que no se convierta en una incidencia demasiado grave para la salud de tu construcción y para la tuya.

Cuando te hayas asegurado de que las humedades de tu casa no van a ir a más, recomendamos la aplicación de una primera capa de pintura plástica antimoho para prevenir su futura aparición y la posterior utilización de pinturas específicas con resistencia al moho y la humedad.

Paso final: es hora de aplicar la imprimación

Una vez hayas terminado de preparar una pared para pintar y hayas reparado todos los posibles desperfectos de dicha superficie, llega el momento de aplicar la capa de imprimación. Este producto sella los poros de la pared para que esta absorba menos pintura, garantiza una distribución más uniforme, una mejor adherencia de la pintura y una cobertura completa del color anterior.

Se aplica de la misma forma que la pintura normal, con un pincel y un rodillo. Cuando lo hayas hecho, tan solo déjalo secar el tiempo recomendado por el fabricante y… ¡tu superficie ya estará lista para ser pintada!

¿Te ha resultado útil este artículo sobre cómo preparar una pared para pintar? En Brico Depôt siempre encontrarás los mejores materiales y consejos para el cuidado y la decoración de tu hogar. Por hoy, nos despedimos aquí.

¡Nos vemos en el próximo Brico Blog!